viernes, 1 de noviembre de 2013

DUEÑOS ABSURDOS

Hay mariposas que vuelan aun muertas en desiertos y arenales,
Emanando risas y sentimientos fértiles en los secos y vacíos pensamientos del caos,
Para desangrar la piel morena en un tiempo fijo,
Para arrancar la piel quemada en la hierba verde,
Para lastimar con dagas la piel canela en el cerro que siente,
Y  colapsar ante la deteriorada piel clara que rompe cristales si miente.

Que perenne resulta la caótica historia que carcome a los huesos en pueblos muertos,
En pueblos sin habla, en pueblos sin vista;
En pueblos sin espíritu de lucha, en pueblos y en más pueblos desechables.

Ya nadie despierta con una sonrisa sentida,
ya nadie despierta con gusto e intriga.
Ahora se pierden cual viles borregos que siguen las manadas sin hallar su dueño.

Un dueño que golpea con palos, sogas y cabestros.
Dueños que ocultan el sabor de la gloria.
Dueños que odian a pueblos enteros y los manipulan como títeres pequeños.